¿El deseo, motor de la vida o del sufrimiento?

 

«El mundo está lleno de sufrimiento. La raíz del sufrimiento es el deseo. El remedio está en desarraigar todo deseo.» Buda.

Normalmente nuestra escala de valores va relacionada a nuestros deseos. Y el deseo, como bien dijo Buda, es lo que produce el sufrimiento. Por tanto debemos cambiar los deseos por sueños.El deseo te crea la necesidad, y la necesidad es la principal enemiga de la felicidad.Los sueños en cambio te crean ilusiòn, motivaciòn, alegrìa, etc.

Cuàl es la diferencia entre deseo y sueño, como se distinguen?, pues con el deseo tu felicidad depende de si se cumple o no ese deseo. Mientras que con los sueños tu felicidad NO depende de si se cumplen o no, eres feliz con el simple hecho de soñar, y si algùn dìa se cumple pues mejor, pero si no, disfrutas de seguir soñando. No caes en la frustraciòn, el abandono, en la ansiedad o depresiòn.....

Si pretendes imponer cambios en tu escala de valores, solo seràn cambios mentales, pero no puedes hacer efectivos esos cambios en tu corazòn, pues cuando, por ejemplo, el Amor Despierta, no puedes volver a hacer que estè dormido. De modo que no serìa mas que un auto-engaño, en el fondo no podrìas dejar de sentir lo que sientes y el dolor se agudizarìa. Pues el deseo persiste, solo que reprimido, lo que lo hace aùn mas fuerte.

No tenemos que abandonar nada, simplemente transformar nuestros deseos en sueños!!

Esto es realmente vivir en la simplicidad, en la sencillez. No necesitas cambiar toda tu escala de valores, no hay ningùn caos ni desorden en ella, no deberìamos complicarnos la vida, cuando las cosas son en verdad tan simples y sencillas como ser consciente de que,

``Algunas personas siempre se están quejando de que las rosas tienen espinas; yo estoy agradecido porque las espinas tienen rosas.``

Existen voluntades, anhelos, sueños, y estos nacen del Corazòn, se podrìan equiparar a la aceptaciòn, que es altamente positiva y creativa.

Despuès tenemos a los deseos, estos persiguen estìmulos y no verdadera felicidad, los deseos no nacen del Corazòn, sino de la mente. Y se puede equiparar a la resignaciòn, que es negativa y destructiva.

Por tanto, siempre que tu felicidad dependa de que se cumpla aquello a lo que enfoques tu atenciòn, se trata de un deseo.

Mientras que siempre que tu felicidad NO dependa de que se cumpla aquello a lo que enfoques tu atenciòn, se trata de una voluntad, un anhelo o un sueño.

Y yo a lo que invito es a cambiar la primera postura por la segunda. Ser sencillos como niños!!

Namastè,